La llegada de la tan deseada "Navidad" nos facilita un ambiente propicio para favorecer la comunicación con los más peques de la casa. "La Navidad" ofrece a los niños y niñas una gran variedad de estímulos que abarcan niveles como el afectivo, cognitivo, sensorial y, sin duda, lingüístico.
* Las reuniones familiares facilitan la interacción de los niños con sus interlocutores, ya sea familia, amigos, etc., y promueve el desarrollo de otros modelos de habla y voz diferentes a los patrones de uso habituales.
* En estos días se da la aparición de objetos "exclusivos" de estas fechas, que provocan una alta motivación en los más pequeños: dulces navideños (nuevos sabores y texturas), panderetas (estimulan la exploración libre, la imitación, el ritmo), luces (estímulos visuales)...
* Nuevas actividades y personajes enriquecen su vocabulario: visitas al belén de la ciudad, nuevos animales (camellos, ocas) nuevos personajes (pastores, herreros)...
* Incluso, los Tres Reyes Magos de Oriente, pueden tener en cuenta la noche del 5 de enero algunos "regalos" que ayudan en la estimulación del Lenguaje Oral, como son:
- Juguetes musicales.
- Espejos de juguete: el estímulo visual ayuda al conocimiento del propio cuerpo y al control de los órganos que intervienen en el habla (labios, lengua...).
- Teléfonos
- Cuentos: el uso de atractivo y variado vocabulario potencia la imaginación y favorece la atención y la memoria.
- Títeres
- Audiciones musicales: favorecen el aumento de los tiempos de atención auditiva.
- Figuras de animales y personas: con las onomatopeyas se da lugar a la creación de nuevos sonidos y posibilidades de nuestro cuerpo a la vez que se desarrolla el juego simbólico.
Deseo que os haya gustado, un fuerte abrazo y...
¡FELIZ NAVIDAD!
